viernes, 23 de noviembre de 2007

Descontrol...




Mi afabilidad se sosiega, entra en trance para despertar más tarde,

en los momentos de tempestad, cuando haga falta su mediación.

Mi serenidad se instala como daga en los corazones,

causando el efecto contrario que esperaba,

provocando la incomodidad en los ojos poco tolerantes.

El abandono se posesiona, arrinconando la compañía y derrotando las ganas de surgir.

El desvelo se apodera de los pensamientos y vislumbra horas de vueltas y vueltas sin fin.

El amor... el amor???... mmm... me pregunto donde está el amor ahora...

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio